Una manera de refrescarte sin tener que mojarte es visitando el Polar Caves Park (Parque Polar Caves) en Rumney. Estas cuevas de granito se formaron hace 50 000 años por los movimientos glaciares, pero su nombre viene de la fría brisa que se sintió cuando se descubrieron las cuevas. Aunque la temperatura dentro de las cuevas ronda los 13 grados Celsius, la mayoría de los visitantes se ponen a sudar cuando tienen que retorcerse para pasar por los espacios oscuros y angostos.